La contratación de un seguro por cualquier concepto es una inversión que requiere sacrificio, educación financiera, y sobre todo, reflexión en medio de la enorme oferta que existe en el mercado.
Lamentablemente, no todos los usuarios disponen del conocimiento necesario para interpretar las cláusulas de la póliza que están por contratar y confían en las descripciones publicitarias del producto. Resultado de lo anterior es que muchos de ellos se llevan desagradables sorpresas al momento en que precisan hacer válido el seguro por el que han estado pagando y la compañía se niega a hacer efectivos ciertos beneficios con el argumento de que no estaban considerados en el contrato o han perdido vigencia.
Lo primero que debe saber al respecto, es que al momento de reportar el siniestro la representación de la compañía recaerá en un ajustador de seguros, quien tendrá la obligación de presentarse con el asegurado mostrando una cédula vigente expedida por la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas.
Enseguida, valorará los daños y dará a conocer a la empresa aseguradora un diagnóstico de la situación a fin de que esta pueda validar los derechos del titular de la póliza. Por lo anterior, buena parte de la responsabilidad ante la aprobación o declinación de su solicitud corresponderá al ajustador y, en algunos casos, el comportamiento negligente o fraudulento de este último puede ser la causa por la que el seguro se niegue a pagar.
En estos casos, encontrarse en la posibilidad de negociar (por ejemplo, cuando lo que se demanda es el resarcimiento de algún daño material) es el mejor de los escenarios. Sin embargo, cuando se trata de una situación de salud o que compromete en algún sentido la integridad del usuario o sus allegados, el proceso legal para exigir el cumplimiento de derechos es arduo y aún más desgastante.
Por ello, debe tener presente que la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros es la autoridad encargada de la atención y seguimiento a las quejas por incumplimiento de contratos de seguros y por tanto, la instancia ante la que podrá presentar su queja.
Así mismo, para obtener una asesoría completa puede acercarse al Instituto Federal de Defensoría Pública del Poder Judicial de la Federación, pero además, será indispensable contar con el respaldo de un grupo de especialistas a cargo de su caso.
Lex & Co Firma Legal, con más de 20 años de experiencia al servicio de las familias mexicanas en materia del cobro de seguros, acción reivindicatoria y cobro de fianza, es una excelente alternativa. Contacte nuestro despacho jurídico fiscal y le ayudaremos a cumplir el propósito de asegurar lo fundamental en la vida.
Lic. Carlos Figueroa Rodríguez, abogado titular de Lex & Co. Cuenta con más de 10 años de experiencia en casos especializados en materia de demandas contra negligencias médicas y aseguradoras. Egresado de la Universidad Anáhuac y con Maestría en Derecho Constitucional y Amparo por la Barra Nacional de Abogados, además, cuenta con un doctorado en Ciencias Jurídicas por la UCI México. Cédula profesional 6577215.
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