La mejor manera de reclamar el pago de un seguro ya sea de vivienda, automóvil, médico o de vida es conocer los derechos y obligaciones que se tienen con base en la póliza contratada para saber cómo hacerla válida.
Existen aspectos básicos que se deben considerar al momento de hacer una reclamación, por ejemplo, verificar la vigencia y ubicación asegurada, así como la descripción del bien. También es importante que el reclamo del seguro se presente por escrito para que haya una evidencia de cuándo ocurrió el siniestro y el momento de la reclamación, esto último es importante porque el sistema jurídico de México establece que todas las reclamaciones deban presentarse por este medio.
La reclamación de un seguro puede dividirse en 5 etapas principales, las cuales son:
1.- Identificar el daño: se deberá hacer una identificación de los daños ocasionados por el siniestro. Lo recomendable es acudir con un especialista que permita identificar exactamente los daños en la propiedad, así como en sus contenidos y no excluir ninguno de ellos.
2.-Evaluar cuantificación: esta etapa también debe realizarse por un especialista que se asegure de incluir todos los gastos que se generarán para hacer las reparaciones como mano de obra, materiales, costos de dirección, supervisión, etc. De lo contrario la aseguradora no hará el pago de estos conceptos y la cifra que se reciba será menor.
3.- Iniciar la reclamación: la reclamación deberá hacerse con base en el contrato, cada póliza tiene sus propias coberturas, términos y condiciones, por lo que hay que asegurarse de hacer una correcta clasificación de los bienes y riesgos para no incurrir en omisiones o errores que pueda ocasionar recibir una menor indemnización.
4.- Conciliación: una vez que la aseguradora tenga toda la información lo que hará es que a través de un ajustador evaluará lo que el asegurado identificó y cuantificó y con base en esos datos pueden tomar dos tipos de decisiones. Por un lado indicar que la información es correcta y que se está de acuerdo con la misma o bien decir que ellos tienen una valoración diferente y tendrán que entrar en una etapa de conciliación donde ambas partes estén conformes.
5.- Ajuste de daños: el siguiente paso es aplicar la póliza al monto de la pérdida. El ajustador procederá a aplicar los términos y condiciones como el deducible, coaseguro, depreciaciones, exclusiones y todo lo que tenga un impacto para definir el monto final.
Si durante alguna de estas etapas no se está de acuerdo con los lineamientos del seguro y se considera que van en contra de lo establecido en la póliza lo recomendable es acudir con abogados de seguros que ayuden en la resolución del caso.
Lic. Carlos Figueroa Rodríguez, abogado titular de Lex & Co. Cuenta con más de 10 años de experiencia en casos especializados en materia de demandas contra negligencias médicas y aseguradoras. Egresado de la Universidad Anáhuac y con Maestría en Derecho Constitucional y Amparo por la Barra Nacional de Abogados, además, cuenta con un doctorado en Ciencias Jurídicas por la UCI México. Cédula profesional 6577215.
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